Aprender otros idiomas es increíble, sin importar tu edad, y las recompensas de hablar más de un idioma son evidentes. Sin embargo, a medida que envejecemos, somos menos propensos a pensar que podemos aprender un nuevo idioma y disfrutar de sus beneficios. Es un error muy extendido. Tanto si has decidido aprender un nuevo idioma por motivos personales, para tu carrera o simplemente para ampliar tus conocimientos, hay numerosas ventajas en dominar una segunda lengua de adulto.
Más oportunidades de empleo
El mundo se vuelve cada vez más interconectado, y con ello, el mercado laboral se está volviendo cada vez más competitivo. Los empresarios buscan a personas que hablen más de un idioma, ofreciendo a menudo salarios más altos y mejores puestos de trabajo. Aprender un segundo (o incluso tercer) idioma puede darte una ventaja tangible sobre los demás en tu sector, y puede abrir nuevas oportunidades profesionales -independientemente de que trabajes para una empresa o siento tú el emprendedor- para trabajar en el extranjero o con clientes internacionales.
Mejora de la función cerebral
Aprender un nuevo idioma requiere habilidades cognitivas y capacidad para resolver problemas, y, como consecuencia, también puede mejorar la función cerebral. Los estudios han demostrado que las personas que pueden hablar más de un idioma han mejorado la función ejecutiva (la capacidad de centrar la atención, filtrar las distracciones y controlar los impulsos) en comparación con las personas que sólo hablan una lengua. Aprender un nuevo idioma también puede retrasar síntomas o condiciones relacionados con la edad, lo que significa que te beneficiarás de un aumento general de la actividad cerebral. Esto implica que puedas mantenerte más despierto, concentrado y energético a medida que envejeces, y no al revés.
Viajar con más libertad
Cuando puedes comunicarte en la lengua local, puedes desplegar todo el potencial para tus experiencias de viaje. Abrirte a conectar con otras culturas puede cambiar absolutamente tu vida. Forjarás conexiones más significativas y vivirás experiencias más auténticas con otros. Aprendiendo un segundo idioma, también puedes tener la confianza para viajar por caminos poco transitados a lugares que rara vez visitan los turistas y crear recuerdos que durarán toda la vida, o bien sentirte seguro en un lugar donde puedes comprender el habla de los otros.
Impulso en tu autoestima
No hay nada que se le parezca a la sensación de dominar con éxito una nueva habilidad, especialmente cuando esa habilidad implica la capacidad de comunicarte con un nuevo grupo de personas. Cuando aprendes un nuevo idioma, el proceso puede ser increíblemente gratificante, y también puede aumentar tu autoestima al darte cuenta de lo capaz que eres. Unido al aumento de la función cognitiva y a los beneficios para tu proyecto laboral, esto supone un impulso positivo y general tuyo, de tu actitud y de tu visión de la vida.
Salta la brecha cultural
Al aprender un nuevo idioma, tienes la oportunidad de saltar la brecha cultural y sumergirte de verdad en otras experiencias desconocidas . Y porque ahora puedes comunicarte, puedes empezar a empatizar y comprender las creencias, costumbres y valores de los demás. También te resultará más fácil comunicarte con personas de otros países y conocer distintos puntos de vista y tradiciones, fomentando la solidaridad y el respeto mutuos.
Existen numerosas ventajas en aprender un nuevo idioma, independientemente de tu edad. Desde mayores oportunidades de carrera hasta una mejora de la función cerebral y una mejor autoestima, puedes disfrutar de las recompensas de aprender un nuevo idioma como adulto, si te tomas la molestia de esforzarte y disciplinarte. La oportunidad de viajar con más libertad, conectar con personas de otros países y saltar la brecha cultural también lo hacen realmente digno de ello. Así que, si has dudado a la hora de empezar a aprender un nuevo idioma, ten en cuenta que nunca es demasiado tarde para hacerlo y que las recompensas merecen mucho la pena.